Dolor de dientes: qué es, causas y cómo prevenirlo

El dolor de dientes, u odontalgia, es una sensación de malestar que varía de leve a grave y que afecta a dientes y estructuras circundantes. Suele ser una señal de que algo no anda bien en la salud bucal.

A continuación, te explicamos las principales causas del dolor de dientes y cómo se puede prevenir.

¿Por qué duelen los dientes?

Su causa es multifactorial, sin embargo, la mayoría se asocia a una inflamación de la pulpa (nervio) causada principalmente por caries y traumatismos.

Entre los síntomas que se asocian al dolor de dientes están los siguientes:

• Dolor agudo o punzante: este tipo de dolor puede ser constante o intermitente, y a menudo se intensifica al morder o al tocar el diente afectado.
• Sensibilidad dental: hablamos de dientes sensibles cuando se presenta un dolor intenso y repentino al consumir alimentos o bebidas calientes, frías o muy dulces.
• Inflamación y enrojecimiento de las encías: pueden deberse a una afectación conjunta de la pulpa (nervio) y de los tejidos que rodean al diente.
• Fiebre: si el dolor de dientes se debe a una infección, es común que se presente fiebre, dolor de cabeza y ganglios linfáticos inflamados.
• Mal aliento o sabor desagradable en la boca: estos síntomas pueden indicar la presencia de una infección o un absceso dental.
• Hinchazón: en casos de infección severa, la hinchazón puede ser intraoral o extraoral, localizada o generalizada dependiendo el grado de afectación.

Causas principales del dolor de dientes

El dolor de dientes puede originarse por diversas causas, que van desde problemas comunes de salud dental hasta condiciones más complejas que afectan las estructuras circundantes. A continuación, se detallan las principales causas del dolor de dientes:

Caries dental

Las caries dentales son la causa más común del dolor dental. Ocurren cuando las bacterias en la boca producen ácidos que disuelven el esmalte, la capa protectora y más superficial del diente.

Si no son tratadas a tiempo, las caries pueden profundizar, creando una cavidad que expone la dentina (la capa sensible debajo del esmalte) e incluso llegar a la pulpa (causando pulpitis), que contiene los nervios y vasos sanguíneos. La exposición provoca dolor, especialmente al consumir alimentos dulces, calientes o fríos.

Exposición de la dentina o desgaste

El desgaste del esmalte deja expuesta la dentina, una capa porosa con pequeños túbulos que conectan con la pulpa dental. Cuando esta dentina queda al descubierto, los estímulos como el frío, el calor o la presión pueden viajar directamente a los nervios del diente, provocando una sensación de dolor agudo y punzante. 

Este desgaste puede ser causado por un cepillado agresivo, el consumo excesivo de alimentos ácidos o el bruxismo.

Enfermedad periodontal

La enfermedad periodontal es una infección crónica de las encías que, si no se trata, puede dañar el hueso y los tejidos que sostienen los dientes. En sus etapas avanzadas (periodontitis), esta infección causa inflamación, sangrado, y la formación de bolsas que acumulan placa dentobacteriana al rededor del diente.

La destrucción de los tejidos de soporte provoca que los dientes se muevan o duelan al masticar, y en casos graves, incluso puede llevar a su pérdida.

Bruxismo

El bruxismo es el hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes, generalmente durante la noche. Este hábito ejerce una presión excesiva sobre los dientes, el ligamento periodontal y la articulación temporomandibular (ATM), lo que puede causar dolor, desgaste dental, fracturas y sensibilidad dental. 

Sensibilidad dental

La sensibilidad dental es una molestia aguda y pasajera en uno o varios dientes, provocada por estímulos externos como bebidas calientes o frías, alimentos dulces, o el aire frío. 

Siendo el resultado de la exposición de la dentina debido a la retracción de las encías, el desgaste del esmalte o las fracturas dentales. Esta condición, aunque no siempre indica un problema grave, puede ser muy incómoda y persistente.

Disfunción en la ATM

La articulación temporomandibular (ATM), que conecta la mandíbula con el cráneo, puede causar dolor intenso. La disfunción en la ATM provoca dolores en la mandíbula, oído y cara que a menudo se perciben como dolor de dientes. Este problema puede ser causado por estrés, bruxismo o una mala mordida, y puede manifestarse como un dolor sordo que se irradia por toda la zona.

Abscesos dentales

Un absceso dental es una acumulación de pus causada por una infección bacteriana. Puede formarse en la punta de la raíz del diente o en las encías, cerca de un diente afectado. Los abscesos son extremadamente dolorosos y se manifiestan con un dolor constante y punzante. Además, pueden causar hinchazón facial, fiebre y mal aliento. 

Si no se trata, la infección puede propagarse a otras partes del cuerpo, representando un riesgo serio para la salud, lo cual necesitará tratamiento dental urgente.

¿Qué hacer cuando te duelen los dientes?

Si se experimenta un dolor de muelas intenso, es fundamental actuar rápidamente. Primero, puede intentar aliviar el dolor con medidas temporales en casa con una compresa fría en la mejilla, en el área del dolor, para reducir la inflamación. 

Los analgésicos de venta libre, como el ibuprofeno o el paracetamol, también pueden ayudar a mitigar el dolor siempre y cuando no tenga contraindicaciones médicas. Enjuagarse la boca con agua tibia con sal puede limpiar la zona y reducir la hinchazón.

Sin embargo, estas son solo soluciones temporales. Es importante acudir al odontólogo lo antes posible, ya que ignorar el dolor de muelas puede llevar a complicaciones graves. Una simple caries puede evolucionar a una infección severa (absceso dental), que podría extenderse a otras partes de la cara o el cuerpo.

Su odontólogo no solo le dará un diagnóstico de la causa de su dolor, sino que puede empezar la planificación para solucionar esta causa. Esto puede implicar la necesidad de tratamientos como la ortodoncia (para corregir una maloclusión dental), empastes o reconstrucciones con resina (para caries superficiales) o endodoncia (para sanar una caries profunda), entre otros.

¿Cómo prevenir el dolor de dientes?

El dolor punzante en los dientes suele ser una señal de que algo no anda bien. Afortunadamente, la mayoría de estos problemas dentales se pueden prevenir con una rutina de higiene dental adecuada. Adoptar estas medidas no solo mantendrá su boca sana, sino que también evitará molestias y complicaciones a largo plazo.

Cepillado regular

El cepillado es la base de una buena higiene bucal. Es fundamental cepillarse al menos dos veces al día con una pasta dental con flúor. El flúor es un mineral esencial que fortalece el esmalte dental y ayuda a prevenir las caries. 

Asegúrese de cepillar todas las superficies de los dientes (la parte de adelante, la de atrás y la superficie para masticar), así como la lengua, donde se acumulan bacterias que causan el mal aliento y enfermedades de las encías (como la gingivitis o periodontitis). Utilice un cepillo de cerdas suaves y realice movimientos suaves y circulares para no dañar las encías.

Uso del hilo dental

El cepillado por sí solo no es suficiente, ya que no puede llegar a los espacios estrechos entre los dientes. El hilo dental es la única herramienta que puede eliminar la placa y los restos de comida de estas áreas, previniendo así la formación de caries interdentales y la inflamación de las encías. Es recomendable usarlo al menos una vez al día, preferiblemente antes de acostarse.

Así mismo, es importante el uso de enjuague bucal para ayudar a eliminar bacterias y restos de alimentos.

Visitas periódicas al odontólogo

Las visitas al dentista son cruciales para una salud dental óptima. Se recomienda programar revisiones y limpiezas profesionales cada seis meses. Durante estas visitas, el odontólogo puede identificar problemas en etapas tempranas, como caries incipientes o signos de enfermedad periodontal o infección dental, antes de que se conviertan en condiciones dolorosas. 

Una limpieza profesional elimina el sarro (placa endurecida), que es imposible de remover con el cepillado en casa. En dentalia, puedes acceder a tratamientos de limpieza dental de la mano de odontólogos expertos que te ayudarán a recuperar y mantener tu salud bucodental.

Dieta equilibrada

Lo que comemos y bebemos tiene un gran impacto en nuestros dientes. Una dieta equilibrada y baja en azúcares es clave para prevenir las caries. Limite el consumo de refrescos, dulces y alimentos procesados, ya que el azúcar es el principal alimento de las bacterias que causan la caries dental. 

En su lugar, elige consumir alimentos ricos en calcio, como lácteos, que fortalecen los dientes, y verduras, que estimulan la producción de saliva, un protector natural contra las caries.

Evitar hábitos perjudiciales

Ciertos hábitos pueden dañar sus dientes y causar dolor. Evite morder objetos duros como hielo o lápices, y no utilices sus dientes para abrir empaques o botellas. Si sufre de bruxismo (apretar o rechinar los dientes), hable con su odontólogo sobre la posibilidad de usar una guarda oclusal para protegerlos del desgaste. 

El uso de tabaco y el consumo excesivo de bebidas alcohólicas también deben evitarse, ya que disminuye la cantidad de saliva en boca, resecando la mucosa interna de la boca y aumentando el riesgo de caries y enfermedad periodontal.

¿Sufres de dolor dental y no sabes por qué? No dejes que la molestia te detenga. En dentalia, estamos listos para ayudarte a encontrar la causa y la solución ¡Agenda tu cita de valoración hoy mismo en nuestra clínica dental y dile adiós al dolor!